No va de broma. Si no que se lo digan a Marcel Hirscher, participante de la copa del mundo de esquí alpino en 2015. Mientras realizaba su descenso un dron se estrelló a muy pocos metros de él. Era la primera vez que se utilizaban estos aparatos para tomar imágenes de una competición de esquí. Imagínate si le llega a caer a la cabeza. Tal fue el susto que a partir de ese momento la Federación Internacional de Esquí prohibió su uso. Y es que, si las ventas de drones han crecido de forma espectacular en los últimos años, también lo ha hecho las situaciones de riesgo provocadas por estos abejorros de hierro.
Te cuento otra anécdota, que seguro recuerdas: Tijuana (México), mayo de 2015. Plaza de toros de Playas. Concierto de Enrique Iglesias frente a 12.000 asistentes. Varios drones sobrevuelan la plaza tomando espectaculares fotos. Uno de ellos se acerca al cantante, que trata de cogerlo con la mano. Quería grabar él mismo algunas imágenes desde su posición. ¿Resultado? Varios cortes en los dedos, lo cual no impidió al artista continuar su concierto porque, como dice la canción, Show must go on.
La palabra dron viene del inglés drone, que significa zángano. Un dron es un vehículo aéreo no tripulado. Puede manejarse con control remoto o a través de aplicaciones móviles. Está dotado de cámaras y GPS.
Aunque se hayan convertido en el regalo estrella de estas navidades los drones no son ningún juguete. En sus inicios se utilizaban con fines militares, principalmente en operaciones de espionaje. Hoy día su uso se ha extendido al ámbito civil y son empleados por las empresas como herramienta para realizar determinadas tareas sin la intervención directa del hombre, bien por su grado de complejidad y riesgo o bien por abaratar costes. Su precio es 60 veces inferior al de un helicóptero.
Requisitos para operar con un dron
No cualquier persona puede manejar un vehículo aéreo no tripulado (VANT). Si deseas hacerte con uno tendrás que sacarte el carnet de piloto de drones y cumplir con una serie de requisitos, bajo la supervisión de la Agencia Española de Seguridad Aérea (AESA). Si además pesa más de 2 kg tendrás que inscribirlo en el registro de aeronaves y obtener el correspondiente certificado.
¿Puedes salir con tu dron al parque para probarlo? No es tan fácil la cosa. Está prohibido el uso de drones en núcleos urbanos y lugares masificados sin la autorización de AESA. Para conseguirla tendrás que solicitarle permiso al menos cinco días antes de operar con él. La sanción por incumplimiento va de 3.000 a 60.000 €.
Estamos a la espera de la aprobación del borrador de la ley que regule la utilización civil de estos vehículos aéreos. Aquí puedes consultarlo.
¿Para qué se usan los drones?
Estos aparatos se están utilizando ya profesionalmente en nuestro país. Mira qué cosas se pueden hacer con ellos:
- Agricultura: sobrevuelan zonas rurales para verificar la existencia de plagas o malezas, comprobar el estado de la reforestación o bien para inspeccionar una determinada finca con fines inmobiliarios.
- Medio ambiente: gracias a su uso ya es posible realizar tareas de prevención y extinción de incendios forestales.
- Ciencia e investigación: permiten realizar investigaciones geológicas, acercándose a los cráteres de los volcanes en activo o incluso al ojo de un huracán, arqueológicas, sobrevolando excavaciones y tomando imágenes desde los lugares más inaccesibles, o biológicas, siguiendo, por ejemplo, las rutas migratorias de las aves.
- Inspecciones de edificios, torres eléctricas, grandes instalaciones o siniestros. Me viene a la mente la tragedia del Madrid Arena, ¿podría evitarse la repetición de un drama así gracias a estos aparatos? Ahí lo dejo.
- Uso en topografía, minería y obras públicas, sin poner en peligro la vida de ningún operario.
- Industria cinematográfica, en la grabación de determinados planos y secuencias de los rodajes.
¿A que no te imaginabas que podían resultar tan útiles? Pues su desarrollo aún está en su fase inicial. Dentro de unos años, cuando las leyes lo permitan, será posible recibir un envío de Amazon, o incluso una pizza a domicilio, a través de un dron.
¿Sabías que es obligatorio disponer de un seguro de drones?
Lo dice el Real Decreto 8/2014. Este seguro es obligatorio para empresas y autónomos. Cubre los daños materiales y personales ocasionados a terceros a consecuencia del uso profesional de un dron hasta un máximo de 300.000 €, según contempla la ley. Atención, he dicho uso profesional. Ni el uso particular ni el militar están cubiertos.
Mapfre acaba de lanzar al mercado su nueva póliza creada al efecto, para drones que no superen el peso máximo de 20 kg al despegue. Nuestro seguro incorpora algunas mejoras, como la posibilidad de que el mismo operador pueda utilizar varios drones o que un mismo dron pueda ser destinado a varios usos. Además, si por exigencias de tu trabajo fuera necesario, te podemos ampliar el límite de cobertura hasta los 600.000 o incluso 1.200.000 €
Así pues, si eres una empresa o autónomo y te planteas adquirir uno de estos aparatos contacta conmigo y contrata tu seguro de drones Mapfre.
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